Octubre 2018: Teatro romano, Mérida

Los teatros, así como otros edificios lúdicos romanos como los circos o los anfiteatros, eran elementos muy importantes para la romanización de las colonias. Aunque el pueblo llano prefería el circo y el anfiteatro al teatro, este tenía una importante labor propagandística para la clase política, por ello no podía faltar en las ciudades romanas.

El teatro se inauguró en el año 16 o 15 a. C. siguiendo las reglas de De architectura de Vitrubio. Se situó en la periferia sureste de la ciudad, y podía albergar a 6000 espectadores, más del 10% de la población de la ciudad.  Fue remodelado unos años después, en el siglo I d. C., momento en el que se hizo el frente de escena que tenemos hoy. Entre los años 333 y 337 volvió a reformarse para solucionar los problemas creados por el uso y el paso del tiempo.

Cuando el 27 de febrero del año 380 el cristianismo fue declarado única religión oficial del Imperio romano, el teatro se consideró no apto para los creyentes, por lo que la gente dejó de acudir y el edificio fue abandonado y poco a poco se derrumbó, quedando solo visible una parte de la grada dividida en siete secciones que se conocía popularmente como “Las siete sillas” y que podemos ver en fotografías de la década de 1860.

En 1910 se comienza la recuperación de la grada y las excavaciones de los restos romanos. Estas obras permitieron que en 1933, después de más de mil quinientos años abandonado, y gracias a que ese año se creó el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, las representaciones teatrales volvieran al edificio.

En 1962 se restauró y volvió a levantar la escena con los restos encontrados. Pese a que hay partes perdidas, esta restauración nos permite hacernos una idea sobre la grandiosidad estética y técnica de los edificios romanos.

El teatro hoy está vivo. En los meses de julio y agosto podemos acudir al Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, que en 2018 hizo su edición número 64, gracias al cual podemos ver representaciones clásicas como Electra, Fedra, Filoctetes entre otras, y que nos acercan a la cultura clásica.

El calendario, lugares en los que se hacen las obras, la programación y más información de interés se puede consultar en la página del festival (https://www.festivaldemerida.es/).

En 1993 fue declaro Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO formando parte del conjunto arqueológico de Mérida.

Si se quiere aprender más sobre el teatro romano de Mérida, se recomienda visitar la web del Consorcio Ciudad Monumental de Mérida (http://www.consorciomerida.org/) donde se puede conocer los horarios de visita, lugares de interés cercanos, actividades que se realizan e historia, además se informa de las visitas guiadas y visitas nocturnas, que siempre aportan otro punto de vista de los monumentos en los que se realizan. También la web de Turismo de Extremadura (http://www.turismoextremadura.com/viajar/turismo/es/index.html) ofrece una gran cantidad de información para conocer mejor el teatro romano de Mérida.